Los 4 errores que cometí al empezar en el marketing de afiliados (y cómo los estoy superando)

admin
admin

Que es el marketing de afiliados

Cuando escuché por primera vez sobre el marketing de afiliados, me llamó mucho la atención la idea de ganar dinero por internet, recomendando productos que yo ni siquiera tenía que crear. Para quienes no lo sepan, el marketing de afiliados consiste básicamente en promocionar productos o servicios de otras personas o empresas y ganar una comisión por cada venta que se realice a través de tu enlace personalizado (tu “link de afiliado”).

Suena increíble, ¿verdad? Y sí, es una forma real y legal de generar ingresos online, pero también es un mundo que tiene su curva de aprendizaje. Nadie nace sabiendo, y yo cometí varios errores al principio que me hubiera gustado evitar.

Hoy existen miles de cursos, herramientas, estrategias, y formas de hacerlo, pero cuando uno está comenzando, es muy fácil sentirse abrumad@. Y lo digo por experiencia. Yo también empecé así: motivada, con ganas, pero sin mucha idea.

Hoy quiero contarte, desde mi experiencia, cuáles fueron los 4 errores más grandes que cometí al empezar, para que tú no caigas en lo mismo si estás comenzando.

1. Pensar que todo era automático

Yo veía TikToks y reels que decían “gana dinero mientras duermes” y pensé: ¡eso quiero yo! Pero no entendía que esas personas ya tenían una estrategia detrás, contenido posicionado y un camino recorrido.

Al principio, lo único que hacía era compartir mi link por todos lados sin dirección ni intención: en grupos de Facebook, comentarios de videos, hasta por WhatsApp. ¿Resultado? Cero ventas, cero clics, y una gran frustración.

👉 Lo que aprendí:
El marketing de afiliados no es magia. Hay que tener una estrategia clara, entender a quién le estás hablando, y generar confianza. Hoy en día me enfoco en crear contenido útil, y en construir una comunidad, no solo en vender.

2. No invertir en mi aprendizaje

Otro error fue no querer invertir ni un dólar al principio. Yo quería todo gratis: cursos, herramientas, plantillas. Y aunque hay contenido gratuito muy bueno, hay cosas que solo entiendes bien cuando tomas una formación completa y te comprometes con el proceso.

Este error me costó tiempo. Quería hacer todo sola, buscando videos gratuitos en YouTube, siguiendo cuentas de Instagram, pero sin una guía real. Era como armar un rompecabezas sin saber cuál era la imagen final.

Después de meses dando vueltas, decidí invertir en una formación completa, y ahí todo cambió. Aprendí a hacer embudos, usar herramientas, entender métricas, y sobre todo, a enfocarme.

👉 Consejo real:
Invertir en tu educación digital no es un gasto, es una inversión en ti y en tu futuro. Ojalá hubiera empezado con una guía desde el principio, me habría ahorrado muchísimo tiempo.

3. No crear contenido con intención

Me daba pena grabarme, me paralizaba la idea de hablar frente a una cámara o incluso escribir un post. Pensaba que no tenía nada valioso que aportar, porque apenas estaba empezando.

Pero luego entendí algo muy poderoso: tu historia es suficiente. Lo que tú vives, lo que estás aprendiendo, lo que probaste y cómo te fue, eso conecta muchísimo más que copiar frases vacías o vender por vender.

👉 Lo que hago ahora:
Comparto mi proceso, mis errores, lo que me está funcionando. Hablo desde la verdad, desde la transparencia. Y así he logrado conectar con personas reales que también están buscando lo mismo que yo: libertad, ingresos online y una vida diferente.

4. Compararme con otros

Este error me dolió. Veía a otras personas que hacían ventas diarias y yo pensaba que algo estaba mal conmigo. Me frustré más de una vez. Pero luego comprendí que cada quien tiene su ritmo, su contexto, y su historia. Hoy celebro mis pequeños avances y sigo aprendiendo cada día sin presión.

La verdad, el marketing de afiliados me ha enseñado muchísimo, no solo sobre ventas, sino también sobre mí misma. Si estás empezando, no te rindas. Equivocarte es parte del proceso. Lo importante es aprender, ajustar y seguir adelante.

👉 Pero aprendí algo que cambió todo:

Cada quien tiene su camino. Algunas personas tienen más tiempo, experiencia, o incluso presupuesto. Yo entendí que mi ritmo es válido, que cada venta que hago es una victoria, y que mi constancia es lo que realmente me va a llevar lejos.

Si este post te ayudó o te sentiste identificad@, me encantaría leerte en los comentarios o que me escribas por redes. Estamos en este camino juntos 💻💖

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Índice